Uno de los problemas más comunes asociado al estilo de vida actual es el
exceso de peso.
La obesidad y el sobrepeso son graves problemas que suponen una
creciente carga económica sobre los recursos nacionales.
Afortunadamente, este mal se puede prevenir en gran medida si se
introducen los cambios adecuados en el estilo de vida.
Es una
enfermedad crónica originada por muchas causas y con numerosas
complicaciones, se caracteriza por el exceso de grasa en el organismo y
se presenta cuando el Índice de Masa Corporal en el adulto es mayor de
25 unidades.
La obesidad no distingue color de piel, edad, nivel socioeconómico, sexo o situación geográfica.
Anteriormente se consideraba a la persona con
sobrepeso como una persona que gozaba de buena salud, sin embargo ahora
se sabe que la obesidad tiene múltiples consecuencias en nuestra salud.
Con excepción de las personas que son muy musculosas,
aquellas cuyo peso supera en un 20 por ciento o más el punto medio de
la escala de peso según el valor estándar peso/altura, son consideradas
obesas. La obesidad puede ser clasificada como leve (del 20 al 40 % de
sobrepeso), moderada (del 41 al 100 por cien de sobrepeso) o grave (más
del cien por cien de sobrepeso). La obesidad es grave en solamente el
0,5 por ciento de las personas obesas.
Sin embargo no existe una definición satisfactoria para esta
enfermedad, tampoco una proporción de peso a talla donde podamos definir
que las enfermedades y complicaciones asociadas que limitan y acortan
la vida.
La obesidad es una amenaza para la vida, es una enfermedad progresiva y
crónica de proporciones epidémicas que afecta a todo el mundo.
La obesidad es una de los problemas de salud más importantes que afectan
tanto a países desarrollados como en vías de desarrollo. La obesidad,
por las enfermedades que derivan de la misma, se ha ubicado como una de
las primeras causas de mortalidad a nivel mundial.
En una definición muy general se puede identificar a la obesidad como el
exceso de tejido adiposo en el cuerpo. Una definición más completa de
la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad la define como una
enfermedad crónica, que se caracteriza por un aumento de grasa, que a su
vez traduce un incremento de peso.
Esta condición puede ser determinada a través de un examen físico mediante dos métodos empleados para la valoración cualitativa: el Peso Relativo (PR) y el Índice de Masa Corporal (IMC).
El Peso Relativo se refiere al peso corporal medio dividido entre el peso deseable x 100, que es el valor recomendado para una talla determinada. Sin embargo, el Peso Relativo no indica una diferencia entre el exceso de grasa y el exceso de músculo; por tal motivo es más recomendable utilizar el Índice de Masa Corporal para reflejar la presencia de exceso de tejido adiposo. El IMC se calcula al dividir el peso corporal medio en kilogramos entre la estatura en metros cuadrados. El IMC regular es de 20 a 25 kg/m2.
En los años
sesenta y setenta estaba muy difundido el mito de que un niño gordito
con mejillas rojas eran un niño sano. Y aunque las mamás servían enormes
raciones a sus hijos, éstos no engordaban tan fácilmente pues tenían
mucha actividad física.
Ya para los años ochenta y noventa, los niños tuvieron menos
actividades en la calle debido a la inseguridad y violencia en las
calles y por la aparición de juegos electrónicos. Los niños se volvieron
sedentarios frente a los videojuegos o a la pantalla de televisión, con
el agravante de que ésta no ha dejado de bombardearlos con anuncios de
comidabasura.
La obesidad
es el resultado del consumo de una cantidad de calorías mayor que las
que el cuerpo utiliza. Los factores genéticos y ambientales influyen en
el peso del cuerpo, pero su interactuación para determinar el peso de
una persona no está todavía aclarada.
Uno de los factores principales que favorecen la obesidad tiene que
ver con el estilo de vida que llevas. El consumo de más calorías de las
que son necesarias, el tener una alimentación deficiente y la falta de
ejercicio contribuyen al aumento de peso.Es fácil entender cómo es que surge la obesidad mediante una simple operación matemática. Si el gasto de energía es menor que el consumo de alimentos (que se transforman en energía), el excedente se acumula en el organismo en forma de grasa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario